Trevelin conmemoró el plebiscito del 30 de abril de 1902
Trevelin conmemoró el plebiscito del 30 de abril de 1902
Esta tarde se conmemoró el plebiscito del 30 de abril de 1902, en la histórica escuela 18 de Río Corintos. El acto estuvo presidido por el intendente de la ciudad, Héctor “Cano” Ingram, el presidente de la Asociación Galesa, Randall Rowlands, la presidenta del Honorable Concejo Deliberante, Claudia Garitano.
Cabe mencionar que estuvieron presentes las bandera de ceremonia de las de las diferentes instituciones y escuelas de Trevelin, los concejales Emilia Méndez, Marisol Salazar, Carlos ríos, miembros del gabinete Municipal, el diputado provincial, Carlos Mantegna, el intendente del Parque Nacional Los Alerces, Hernán Colomb y el presidente de Lotería del Chubut, Luis Maria Aguirre.
Nuestra historia
El 30 de abril de 1902 se acordó que un grupo de lugareños que habitaban en el valle 16 de octubre vivieran bajo la bandera Argentina.
Por el lado chileno se encontraba el geógrafo alemán, Hans Steffen, contratado por este país para realizar la demarcación, y por el lado Argentino se encontraba el perito Argentino, Francisco Pascasio Moreno que a lomo de caballo recorrió la Patagonia buscando argumentos para elaborar la posición Argentina.
El 30 de abril de 1902 estos hombres se encontraban el valle 16 de octubre, precisamente en la escuela N° 18, el delegado arbitral Británico, Sir Thomas Holdich, el representante chileno Hans Steffen y en representación de Argentina, Francisco Pascasio Moreno junto a unos trescientos pobladores, estos ante la consulta del delegado arbitral (Thomas Holdich) a que nación querían pertenecer, optan por la Nacionalidad Argentina del territorio, patria que los cobijo desde 1885.
Manifestando ese día “Queremos seguir perteneciendo a la patria que nos cobijó”, este acto patriótico, de pertenecía a nuestra patria se mantuvo en la memoria colectiva de la colonia del valle 16 de octubre, que año tras año asistió a la vieja escuela a rendir homenaje a aquellos colonos que decidieron ser argentinos, en un momento en que las relaciones de ambos países eran por demás estrechas y solo se avecinaba un horizonte de guerra sin precedentes.